Hoy es April Fools. Para los que no sepan lo que eso significa, digamos que es la versión, que se celebra en distintos países, de nuestro 28 de diciembre, Día de los Inocentes, pero sin la truculenta historia de Herodes y los niños.
Este día, así como en el nuestro, se festeja haciendo bromas. Las marcas, los medios de comunicación y las personas, en general, usan esta fecha para crear noticias falsas, productos inventados (como la hamburguesa de chocolate) y hacer bromas pesadas a sus amigos.
Más allá del carácter festivo, esto nos deja una reflexión. ¿Por qué nos causa tanta emoción que exista un día al año como este?
Quizás sea porque es un día en que dejamos salir a jugar a nuestro niño interior, con la licencia que nos da la sociedad de permitirnos romper con la solemnidad cotidiana.
Y así damos rienda suelta a la diversión, dejándonos llevar por las emociones sin riesgo a ser juzgados de ridículos, al fin y al cabo, casi todos lo hacen.
Y aquí es donde te pregunto ¿de verdad necesitas que haya un día para sacar a pasear a tu niño interior?
¿No sería mejor que fuera al revés, y tuviéramos un día para ser ese adulto serio y aburrido en el que nos hemos convertido, y dejáramos que el niño que fuimos se paseara libremente por nuestra vida todos los días?
"No reímos porque somos felices, sino que somos felices porque reímos" William James
Mira, cuando el humor entra en tu vida, viene cargado de beneficios.
1.- Te vuelves más creativo
Las ideas fluyen, te permites imaginar soluciones menos convencionales y las tareas rutinarias del trabajo te parecen más soportables. Y esto aplica no sólo para publicistas o gente cuyo trabajo es generar ideas. Puedes encontrar nuevas formas de hacer un balance contable, por ejemplo.
2.- Recuperas tu poder al ignorar el juicio externo
Y también el interno. Nos han vendido la idea que reírse y jugar es cosa de niños, y un adulto se ve inmaduro cuando se deja llevar por el humor. Y entonces nos volvemos huraños e irritables; los problemas nos abruman y nos ahogamos en un vaso de agua.
En cambio, al no tomarte tan en serio a ti misma, al darte permiso para reírte de las cosas que te suceden, dejas de sentir miedo al qué dirán. Y no se trata de hacerte autobullying, sólo de darte cuenta de que no eres perfecta y puedes equivocarte.
Al ser una persona menos susceptible a la opinión de los demás, esto aumentará tu autoestima, lo que será percibido por las personas que te rodean que disfrutarán más estar cerca de ti. Recuerda que a nadie le gustan las personas que van con cara de sufrimiento, como mi vecina la Llorandita.
3.- La risa oxigena tu cuerpo
¿Sabías que un niño ríe más de 200 veces al día, mientras que un adulto lo hace entre 15 y 50 veces al día?
Cuando reímos el cerebro libera endorfinas, nuestros pulmones reciben más oxígeno y cerca de 400 músculos de nuestro estómago se ven ejercitados.
Aunque sea por salud ¿no te parece una excelente idea reír?
4.- Bajan tus niveles de estrés
Reír, idear bromas, ir por la vida más relajada te permite bajar tus niveles de estrés. Como ya lo hemos platicado con anterioridad, el estrés cierra las funciones digestivas, por lo que tendemos a acumular grasa, y creo que muchas de nosotras, y ellos también, queremos justo lo contrario.
Piensa si algunos de esos kilos rebeldes que se niegan a abandonarte no están relacionados con el estrés. ¿Por qué no te atreves a probar la “dieta de la risa”? Total, si no los pierdes, al menos te habrás divertido más que con una dieta extenuante.
En fin, podría seguir enumerando muchos más beneficios que la risa y el buen humor traen a tu vida, pero eso será material para otra entrada.
Lo que quiero hacer es invitarte a que cambies esos pensamientos de que estás haciendo el ridículo y te permitas disfrutar más de la vida, como cuando eras niña. Y aprovechando el April Fools, busca qué broma puedes hacerle a tus amigos, familiares o compañeros del trabajo…y cuéntanos en los comentarios qué tal te fue.